Paul McCartney ha recuperado un bajo de la marca Höfner, más de medio siglo después de que fuera robado, y tras una investigación iniciada el año pasado por la propia marca de instrumentos musicales.
La guitarra fue comprada por McCartney en 1961, mucho antes de saltar a la fama, cuando los Beatles ya existían y se encontraban de gira por pequeños clubes en Alemania.
Este modelo ha estado históricamente vinculado a McCartney, que ha reconocido en numerosas ocasiones que se enamoró del instrumento por su peculiar diseño simétrico, parecido a un violín.
El exBeatle pagó 30 libras esterlinas hace 63 años por el bajo, aunque hoy costaría unos 800 libras. Según el diario The Guardian, que desvela la noticia, el instrumento podría alcanzar los 10 millones de libras en subasta.